LAS VACAS DE MIGUEL ZABALLOS ¿PURAS SALTILLO?
Abril de 2009, nos dirigimos a la finca Cabeza de Diego Gómez en Salamanca, propiedad del ganadero Miguel Zaballos, para que nos enseñe un toro para las calles. Llegamos un poco antes de la hora establecida y observamos desde la carretera un hato de vacas del mismo hierro. Bajamos para observarlas y poder fotografiarlas.
Para conocer el origen de esta vacada, tenemos que remontarnos a 1914, cuando Argimiro Pérez Tabernero recoge de Dionisio Pelaez, cien vacas y dos sementales adquiridos al Marqués de Saltillo y Conde de Santa Coloma. Argimiro, hermano de Antonio, Graciliano y Alipio, anteriormente criaba junto a sus hermanos, reses originarias de la cruza Miura-Veragua, pero pronto descubrió que el futuro se encontraba en otro sitio. A posteriori, añadió reses al Duque de Tovar, también con el hierro del Conde de Santa Coloma.
Se comenta que las reses de origen saltillo sufrieron ciertas cruzas con otras de procedencia Ybarra-Murube, Argimiro también criaba una punta con origen de Antonio Pérez, su hermano.
El sueño de este salmantino, se truncó en 1936, cuando fue asesinado, al igual que sus hijos, durante la Guerra Civil. A su muerte, la viuda le encargó al administrador de la ganadería que la pusiera en venta. Es aquí donde Miguel Zaballos, abuelo del actual propietario, adquiere una parte.
Todo un tratante, el señor Zaballos se dedicó durante muchos años a la compra-venta de ganado. Ya cuando adquirió sus saltillos, también tuvo paralelamente (pero sin cruzarse) toros de Antonio Pérez, de Raboso, algunas vacas. En el 63 compra el viejo hierro de Hernández Pla para integrarse en la Unión, y junto a él, una mezcla de distintos ganados: de Pinohermoso (Murube), Albaserrada y un semental de Samuel Flores. De aquello, según comenta su nieto en el Opus número 2 de Tierras Taurinas, su abuelo no conservó nada.
En el 78, a la muerte de Miguel Zaballos, se hizo cargo su yerno, conocido como Felipe Zaballos, el que descubrió al semental Hurón, que hizo a la ganadería reafirmarse en la procedencia Saltillo. Actualmente es regentada como hemos apuntado anteriormente por su hijo, Miguel Zaballos.
Unos estudios realizados en la universidad de Madrid por Javier Cañón, dicen que la ganadería de Zaballos es lo más puro de Saltillo. De los cuatro sementales que se analizaron, uno era Saltillo al 94,3%, otro al 84,6% y el tercero al 79,9%. Un cuarto que se analizó, sacó un 69,3%, a consecuencia de un antepasado con procedencia de Antonio Pérez.
Sin embargo, como bien apunta André Viard en su Opus, y nosotros pudimos comprobar in situ, los tipos en el hato de madres son dispares. Las hay de poca talla, más finas, de cabeza alargada, estrechas de sienes, degolladas, de cuello largo, que no pueden ocultar su origen saltillo. Pero la verdad es que las hay también más corpulentas, no tan finas, con hocicos más chatos y lomos y pechos más prominentes.
Les dejo unas pocas fotografías para que juzguen ustedes mismos.
Para conocer el origen de esta vacada, tenemos que remontarnos a 1914, cuando Argimiro Pérez Tabernero recoge de Dionisio Pelaez, cien vacas y dos sementales adquiridos al Marqués de Saltillo y Conde de Santa Coloma. Argimiro, hermano de Antonio, Graciliano y Alipio, anteriormente criaba junto a sus hermanos, reses originarias de la cruza Miura-Veragua, pero pronto descubrió que el futuro se encontraba en otro sitio. A posteriori, añadió reses al Duque de Tovar, también con el hierro del Conde de Santa Coloma.
Se comenta que las reses de origen saltillo sufrieron ciertas cruzas con otras de procedencia Ybarra-Murube, Argimiro también criaba una punta con origen de Antonio Pérez, su hermano.
El sueño de este salmantino, se truncó en 1936, cuando fue asesinado, al igual que sus hijos, durante la Guerra Civil. A su muerte, la viuda le encargó al administrador de la ganadería que la pusiera en venta. Es aquí donde Miguel Zaballos, abuelo del actual propietario, adquiere una parte.
Todo un tratante, el señor Zaballos se dedicó durante muchos años a la compra-venta de ganado. Ya cuando adquirió sus saltillos, también tuvo paralelamente (pero sin cruzarse) toros de Antonio Pérez, de Raboso, algunas vacas. En el 63 compra el viejo hierro de Hernández Pla para integrarse en la Unión, y junto a él, una mezcla de distintos ganados: de Pinohermoso (Murube), Albaserrada y un semental de Samuel Flores. De aquello, según comenta su nieto en el Opus número 2 de Tierras Taurinas, su abuelo no conservó nada.
En el 78, a la muerte de Miguel Zaballos, se hizo cargo su yerno, conocido como Felipe Zaballos, el que descubrió al semental Hurón, que hizo a la ganadería reafirmarse en la procedencia Saltillo. Actualmente es regentada como hemos apuntado anteriormente por su hijo, Miguel Zaballos.
Unos estudios realizados en la universidad de Madrid por Javier Cañón, dicen que la ganadería de Zaballos es lo más puro de Saltillo. De los cuatro sementales que se analizaron, uno era Saltillo al 94,3%, otro al 84,6% y el tercero al 79,9%. Un cuarto que se analizó, sacó un 69,3%, a consecuencia de un antepasado con procedencia de Antonio Pérez.
Sin embargo, como bien apunta André Viard en su Opus, y nosotros pudimos comprobar in situ, los tipos en el hato de madres son dispares. Las hay de poca talla, más finas, de cabeza alargada, estrechas de sienes, degolladas, de cuello largo, que no pueden ocultar su origen saltillo. Pero la verdad es que las hay también más corpulentas, no tan finas, con hocicos más chatos y lomos y pechos más prominentes.
Les dejo unas pocas fotografías para que juzguen ustedes mismos.
Nota: muchos datos han sido obtenidos de los Opus nº 2 y 22 de Tierras Taurinas de André Viard.
Comentarios
Publicar un comentario