EN EL RECUERDO: UN GENIO, MORANTE

¿Quien no recuerda aquella faena que el artista de La Puebla le realizó a aquel noble y bravo toro de Núñez del Cuvillo?

Una obra genial, como lo es José Antonio, a un ejemplar de nombre Pajarraco, procedente de la buena reata de origen Maribel Ybarra de esta ganadería, un 9 de octubre de 2005, cuando todavía en esas fechas, en Valencia, solían hacer carteles de gran atractivo. 

Esa manera de mecer el capote, la forma de andar, sus gestos, pura torería... quien pudiera volver a aquella plaza para revivir aquello. Inspiración, improvisación, no hubo nada premeditado, todo imperfecto pero de gran calado. Despaciosidad, toreo al ralentí, en ocasiones, se paraba el tiempo. 

Variedad, tauromaquia de un pasado en tiempos modernos, un molinete belmontino, un pase de pecho a pies juntos. Nada que desperdiciar, todo con sus matices. 

Como dice el dicho, vale más una imagen que mil palabras...